El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, rechazó este lunes cambiar la sede de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh), ubicada en Washington, y defendió su «plena autonomía».
En un encuentro este lunes con organizaciones no gubernamentales, en la víspera de la apertura de la 44 Asamblea General del organismo, dijo que las propuestas de reforma de ese órgano de la OEA requieren cambios a los tratados que rigen su actuación.
«El proceso de reforma solo podría culminar exitosamente para quienes lo proponen con una reforma sustantiva a la Convención de Derechos Humanos y la Carta de la OEA», dijo el exministro chileno.
«Eso es un camino inconducente, porque todos sabemos que no va a ocurrir», añadió.
Explicó que la secretaría de la CIDH «es la secretaría general de la OEA», por lo que cambiar su sede implicaría trasladar la sede de la propia organización.
«La pregunta es qué sentido tiene eso y sobre todo si un debate interminable sobre esto fortalece o debilita a la Comisión de Derechos Humanos», dijo.
Los participantes en la IV Conferencia de Estados Parte del Pacto de San José, que tuvo lugar en Haití el pasado martes, propusieron sacar a la Cidh de Washington y Haití se ofreció para acogerla.
La reforma de la Cidh, que también incluye propuestas para aumentar el control de sus actividades por parte de los Gobiernos, es impulsada por Ecuador, que cuenta con el apoyo de otros países de la región.
UN/www.diariorepublica.com