Estados Unidos intenta restarle importancia a la amenaza de guerra en la península coreana y ha exhortado a Pyongyang a seguir lo que calificó como un camino menos inútil y belicoso.
Sin embargo, tras conocer las informaciones sobre el desplazamiento de misiles por parte de Pyongyang, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, afirmó que no le sorprendería que Corea del Norte hiciera un lanzamiento de prueba de un misil.
Washington indicó que la retórica de ese país era preocupante, pero que estaba seguida de un patrón de provocación y adaptación.
Un corresponsal de la BBC en Seúl, Corea del Sur, indicó que Estados Unidos espera que Corea del Norte sea frenado por China, su antiguo aliado.Estados Unidos ha enviado en los últimos días dos destructores navales a la región y un sistema de defensa antimisiles al territorio estadounidense de Guam.
Vía BBC