Aviones de guerra de la coalición liderada por Estados Unidosbombardearon posiciones de las fuerzas del régimen sirio en el este del país dejando varios muertos,indicó la agencia oficial siria en la madrugada del lunes.
“Aparatos de la coalición estadounidense bombardearon una de nuestras posiciones militares en la zona de Al Hari, en el sureste de Bukamal”, una ciudad de la provincia oriental de Deir Ezzor, escribió la agencia Sana, citando a una fuente militar.
En la provincia de Deir Ezzor, rica en petróleo, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) apoyadas por Estados Unidos y las tropas del régimen llevan a cabo sendas ofensivas paralelas contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Las tropas de Damasco controlan las tierras al oeste del Éufrates, que divide la provincia en dos, mientras que las FDS luchan por expulsar al EI de varias localidades situadas en la orilla oriental del río, cerca de la frontera con Irak.
Los dos bandos han logrado evitar en gran medida los enfrentamientos en la zona, y se ha marcado una línea de separación para evitar incidentes; pero ha habido excepciones.
En abril, hubo choques entre ambos campos, que dejaron más de una decena de combatientes muertos.
En febrero, la coalición dirigida por Estados Unidos llevó a cabo bombardeos en la provincia de Deir Ezzor, en los que fallecieron al menos 100 combatientes prorrégimen.
Washington indicó entonces que esos bombardeos eran represalias por un ataque contra su propio personal y las FDS.
Trump: «Misión cumplida»
Estados Unidos dio un paso adelante mirando atrás. En una calculada operación militar, atacó en coordinación con Francia y el Reino Unido al “bárbaro” régimen de Bachar El Asad por el supuesto empleo de gas cloro contra la población civil de Duma (Siria). La represalia, respaldada por Occidente y presentada como un «golpe de precisión» contra centros de producción y almacenamiento de armas químicas, evitó cuidadosamente el riesgo de escalada. No hubo soldados muertos y, según las primeras versiones, tampoco daños a la población civil. Todo quedó en una intervención quirúrgica que le permite a Washington mantener abierta su salida y enviar una señal de firmeza a Rusia, Irán e incluso Corea del Norte. “Misión cumplida», festejó el presidente, emulando la proclama que acompañaba en mayo de 2003 a George Bush hijo cuando a bordo del portaviones Abraham Lincoln anunció el fin de los combates en Irak. Una imagen que se volvió un símbolo del error.
Con información de Teletrece/El País/Diario República
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