Seguro que alguna vez has creído algunas de estas conocidas supersticiones y ni siquiera sabes por qué, pero aquí te traemos un poco de historia al respecto. ¡No te lo pierdas!
Conocidas supersticiones: ¿Hay algo de lógica en ellas?
Miedo a los gatos negros, considerar que romper un espejo es señal de infortunio… Hay supersticiones que suenan completamente absurdas, pero ¿y si te dijéramos que en el momento de su origen tenían una cierta base?
Pasar por debajo de una escalera de mano de mala suerte
Si la visualizas en tu imaginación una escalera abierta o apoyada en la pared tiene la forma de un triángulo. Los triángulos una vez fueron considerados un símbolo de la vida, por lo que caminar pasar por ellos se consideró como tentar al destino. También se piensa que debido a que tiene tres lados, el triángulo simboliza la Santísima Trinidad, y al romperlo se atraería la mala suerte. Además, siendo sinceros, pasar debajo de una escalera no suena como lo más seguro del mundo. Así que, en realidad ¡sí que es tentar a la suerte!
Los gatos negros traen mala suerte
Esta es quizás una de las más conocidas supersticiones. Los gatos son excéntricos, y muchos de sus hábitos tienden a ser confusos para la gente. Les gusta el calor pero algunas son, en contraste sumamente independientes, a diferencia de los perros. Pero la razón por la que se considera a los gatos negros de mal augurio es porque en ocasiones, cuando una persona fallecía en la antigüedad por fiebres o un bebé moría misteriosamente en la noche, fueron encontrados con gatos posados en su pecho o en la cuna mirando a la cara, de allí que se extendiera la creencia de que eran portadores de mala suerte.
Además, en la mitología celta, hay una criatura llamada el Cait Sith, que puede ser la raíz de la conexión del gato negro con la brujería: se creía que un gran gato negro con algunas manchas blancas podía robar el alma del cadáver antes de que los dioses la reclamaran apropiadamente.
Otras personas señalan la leyenda nórdica de Freya, la diosa del amor y la fertilidad, cuyo carro fue tirado por dos gatos negros. Supuestamente después de servir a Freya durante siete años los gatos fueron recompensados por su servicio siendo convertidos en brujas.
Cortarse el cabello en martes
Esta explicación científica detrás de esta antigua creencia india es que en el pasado la mayoría de los indios eran agricultores y ganaderos. Después de una semana de trabajo duro, el lunes era su día de descanso. Naturalmente, la mayoría de ellos limpiaban sus casas y se arreglaban el pelo ese día. Por eso, el barbero no tendría mucho trabajo los martes y cerraba su tienda. Esta práctica continúa en muchos lugares hasta la fecha.
Romper un espejo es de mala suerte
Esta creencia puede tener que ver con el hecho de que en la época medieval, los espejos eran un lujo que sólo alguien importante se podría permitir uno de ellos, una persona como el señor del reino o un noble de alto rango. Lo que quiere decir que si rompías un espejo, te meterían en la cárcel, posiblemente durante siete años.
Tocar madera da buena suerte
Golpear sobre la madera, o simplemente decir “toco madera” es una creencia que proviene de la antigua creencia de que los buenos espíritus vivían en los árboles, por lo que tocando algo de madera, una persona estaba invitando a los espíritus y a su protección.
¿Conocías el origen de estas supersticiones? ¿Imaginabas que eran estos?
Agencias