El caso de Bobbi Kristina Brown, hija de la famosa Whitney Houston, ha tocado el corazón del público. A pesar de que los doctores han dicho que no pueden hacer nada más por ella, el padre de la joven de 21 años, Bobby Brown, está a la espera de un milagro y se niega a retirarle la respiración artificial.
La joven fue diagnosticada con muerte cerebral el 5 de febrero por lo que varios medios, entre ellos Daily Mail, aseguraban que había sido desconectada de las máquinas que la mantenían con vida.
No obstante, el sitio TMZ, que ha estado al tanto del caso, aseguró que este rumor es falso y ellos confirmaron con fuentes cercanas a la familia que la joven aún permanece conectada al respirador.
Sin embargo, los médicos han dicho a la familia que «es tiempo de dejarla ir».
Su padre no se separó ni un momento de ella y no ha parado de llorar por la tragedia que sufrió su hija. El jueves fue un día enteramente difícil para él, pues fue su cumpleaños y estaba supuesto tomar la decisión de dejar ir a su pequeña Bobbi quien nació en 4 de marzo de 1993.
El sitio también asegura que la abuela de la joven, Cissy no ha podido ver a su nieta, pero hay planes de llevarla al hospital Emory University, donde fue trasladada el jueves pasado, para que se despida de ella.
Bobbi fue encontrada por quien dice ser su esposo, Nick Gordon y un amigo, boca abajo en la bañera de su casa en Georgia el pasado 31 de enero y desde entonces, los médicos la habían puesto en coma inducido debido a que presentó una inflamación en el cerebro tras el incidente, detalló el sitio TMZ.
Vía SyP / www.diariorepublica.com