“Nos sentimos muy contentos, primero porque en 15 años de Revolución incrementamos en 29% la matrícula en todo el sistema escolar nacional y, por otro lado, las cifras de deserción en educación primaria la bajamos de 5% que registraba en los años 1990, a 0,3% hoy. Es decir, que prácticamente no tenemos niños, de 6 a 12 años, que abandonen la educación primaria”.
La cita es de la ministra de Educación, Maryann Hanson, cuando ofrecía el balance de los logros de la Revolución Bolivariana, durante entrevista conducida por la periodista Érika Ortega en el programa Mesa Informativa, que transmite Venezolana de Televisión (VTV).
Hanson explicó que este inédito logro educativo, se debe a varios factores vinculados a decisiones políticas del Gobierno Bolivariano, entre ellos el suministro de alimentación escolar, la prohibición de cobro de mensualidades o pagos en dinero y la entrega gratuita de textos escolares y computadoras para el estudio.
“La gente de oposición dice que no pueden ser esas cifras de deserción. ¡Claro que sí!; ese nivel de deserción tan bajo, ínfimo, en este momento, tiene una razón: no cobramos matrícula escolar”, explicó, recordando que la primera decisión del Comandante Chávez como presidente en 1999 fue prohibir el cobro de dinero en planteles oficiales. “No se cobra mensualidades, está absolutamente prohibido solicitar dinero de cualquier tipo”, dijo.
Recordó que entre 1998 y 2013 el suministro de alimentación se incrementó en 3 mil 542%, pasando de poco más de 119 mil niños que recibían leche y merienda a tener 4 millones 300 mil estudiantes alimentándose bien en los centros escolares.
Además, refirió el suministro de textos de la Colección Bicentenaria, que en 3 años ha elaborado y distribuido más de 77 millones de libros escolares, sumado al exitoso proyecto de entrega de computadoras educativas Canaimita, ideas del Comandante Chávez.
“El programa Canaima es emblemático en el mundo. La UNESCO otorgó premio a este programa como buena práctica educativa por sus asombrosos logros”, dijo Hanson, destacando también la democratización de las tecnologías como aporte al desarrollo de la calidad de la educación.
“Venezuela es el único país en el mundo donde se entregan textos y computadoras gratuitas”, sentenció.
Currículo Nacional Bolivariano:
Por otra parte, la ministra Hanson fue contundente en sentenciar que Venezuela realizó la consulta y desarrollo del currículo nacional bolivariano para su aplicación en la educación, hecho inédito en el planeta.
“En ningún país del mundo se consulta el currículo nacional educativo”, recordó Hanson.
“Participaron todos los que quisieron participar; solamente en mesas de trabajo estuvieron más de 50 mil personas, entre padres, docentes, representantes, estudiantes…”, refirió, desestimando las críticas de voceros de oposición, herederos de la Cuarta República.
“Nosotros ya no enseñamos por asignaturas o disciplinas, nosotros enseñamos por área de conocimientos, ejes integradores…y también por proyectos que vinculan al niño con su realidad inmediata, la de su escuela, de su comunidad, de su estado”, dijo, agregando que estos proyectos están vinculados al diagnóstico de los problemas de la comunidad, para resolverlos.
Afirmó que Venezuela está en un proceso de transformaciones sociales, donde el sujeto (el niño estudiante), no puede ser pasivo, que solo reciba contenidos. “Eso es el enfoque capitalista…”, explicó la ministra. Puso como ejemplo el llamado “humanismo burgués”, que aun cuando trabaja en grupos va dirigido al individualismo. “Nosotros fortalecemos valores de solidaridad, cooperación, corresponsabilidad”, dijo, sobre esta alternativa que algunos autores identifican como Pedagogía Revolucionaria, por el enfoque crítico y social de la realidad.
“No podemos transformar un país hacia el socialismo si nosotros no trabajamos con una pedagogía revolucionaria. Existen las pedagogías del capitalismo que, por cierto, algunos consideran como natural en las escuelas, pero la pedagogía crítico-social lo que plantea es, más allá, pero muchísimo más allá y tomando distancia de lo que significaría el adoctrinamiento -como dicen algunos-, es colocar al niño, a la niña y al adolescente, en el caso de la educación básica, en una situación de observación, reflexión, análisis, síntesis, evaluación y transformación. Colocamos al niño en situación de hacer una crítica a lo que está establecido o lo que no está bien, para transformarlo”.
Información de Sibci