Advierte que del lado colombiano hay voluntad de ayudar, pero “hay zonas en las que no tienen control”. Acerca del diálogo dice: Puede incluir todos los temas, incluso el referendo.
El gobernador Francisco Arias deja claro que una decisión sobre la reapertura de la frontera depende del presidente Nicolás Maduro, pero si fuera consultado sobre el tema, diría que “hay factores que confluyen para repensar la situación y, haciendo los cambios que el Presidente señaló, reabrir la frontera”.
—El presidente Santos ha pedido la reapertura del paso fronterizo, ¿cuál es su opinión sobre esa solicitud?
— La decisión de reabrir la frontera, así como la de su cierre en un momento determinado, corresponde al Jefe del Estado y comandante en jefe de la Fanb (…) Nuestra frontera tiene una dinámica en Paraguachón que se diferencia a la del Sur del Lago de Maracaibo, a la de Tibú, en el caso preciso de Paraguachón en un momento determinado se hizo necesaria la decisión que tomó el Presidente, teníamos una suerte de espiral de productos de Venezuela hacia Colombia, con complicidades de todo tipo, esto no ha cesado, pero ha tendido a variar con la propia política económica nuestra, con los proyectos de la economía productiva, con la sinceración de algunos precios, hay todo un dinamismo en esta frontera en particular que permite hacer análisis de este momento y diferenciarlo con aquel en el que cerramos la frontera.
(…) El Presidente ha venido haciendo sus propios análisis y él tomará la decisión cuando le parezca pertinente con el elemento de que han variado los factores que nos obligaron al cierre de frontera, esas son decisiones no se toman por voluntad, forman parte de un análisis que en aquel momento orientó hacia la urgencia de cerrar la frontera, el análisis actual va a determinar si ya están dadas las circunstancias para reabrirla y en qué condiciones vamos a funcionar (…).
— Si el Presidente le consultara su opinión sobre reabrir o no la frontera, ¿cuál sería?
— (…) Siento que las circunstancias cambiaron, tenemos que tomar algunas medidas para evitar daños a los dos países, como en el tema del paramilitarismo, hay un cambio en la pacificación que se está dando con las Farc, en Colombia, hay además el cambio en los precios de los productos venezolanos, hay factores de control que se están dando de una mejor manera en el tema de la distribución del combustible, con su venta a precios internacionales, hay bastantes factores que confluyen para repensar la situación y, haciendo los cambios que el Presidente señaló, reabrir la frontera, pero la decisión la va a tomar el Jefe del Estado.
— ¿Colombia está apoyando para regularizar la situación fronteriza, o sigue siendo muy tibio su aporte?
— Por ejemplo en Tibú, donde hay pugna por el raspado de la coca, hay una confrontación permanente con grupos paramilitares, grupos de guerrilla política y el propio Ejército de Colombia están en pleno conflicto en esas zonas, igual en el Catatumbo, en la frontera Guajira (…) No digo que no quieran ayudar, es que hay una situación de conflicto bien particular, es difícil decir que tienen el control pleno por parte del Estado colombiano.
— ¿De qué manera la llegada de productos colombiano ha incidido en atenuar el impacto de la crisis de abastecimiento en el Zulia?
— La propia dinámica de la frontera es la que orienta esa movilidad de productos, seguramente con la apertura de la frontera se hará de una manera más regular, más orgánica, pero ahorita con el derecho de paso que tienen los wayuu hay cantidad de elementos que vienen y traen del lado colombiano, nosotros no tenemos detenido, parado el tráfico de los wayuu, al contrario, ellos tienen una autorización y han pedido entrar libremente, lo que se cerró es para el comercio regular y esta gente está trayendo una buena cantidad de productos de consumo colombiano que ayuda y facilita la oferta, lo que han traído lo venden a la mitad de los precios que los venden los bachaqueros, revendedores de los propios productos venezolanos, siento que eso ha ayudado bastante (…) Todavía se ven allá productos venezolanos, esa es una interacción que en la medida que tengamos un equilibrio de los precios y un subsidio no al producto, sino al consumidor venezolano, mejorará.
— Sobre el tema del abastecimiento, el Gobierno se ha montado en la política asistencialista de los Clap, considera que esa medida debe ser temporal o se debe prolongar mucho más allá en el tiempo?
— No es asistencialista porque se está vendiendo, no se regalan los productos. Se está tratando de acabar con los intermediarios, había productos que estábamos trayendo con dólar preferencial y que estaban comprando en las puertas de supermercados y abastos los bachaqueros para después revenderlos a unos precios que están muy por encima del dólar clandestino, eso es lo que estamos tratando de parar con los Clap para que lleguen los productos a los precios que están establecidos (…) Esto no quiere decir que vamos a dejar la oferta de las bodegas, los abastos, los supermercados, pero vamos a minimizar las distorsiones que tenía el bachaqueo y la reventa de productos.
— Más allá de temas fronterizos, está el tema del diálogo que luce estancado, ¿qué pasa con el diálogo, demasiadas condiciones?
— El que va a dialogar está dispuesto a tocar todos los temas, no eso de que yo dialogo pero si el Presidente se va, eso no tiene sentido (…) Para nosotros dialogar significa, primero, el respeto al Presidente constitucional de la República y, segundo, el respeto al marco legal; eso es lo fundamental. Eso es distinto a lo que hizo el presidente de la Asamblea que usa ese espacio para sacar al Presidente, eso es una declaración de guerra (…)
— ¿No sería también el referendo revocatorio una manija para destrabar el diálogo?
— El diálogo puede incluir todos los temas, hasta ese pues. Pero no puede ser eso de dame el referendo ya y yo voy a dialogar, eso no tiene sentido. Pero ahí hay un error de fondo que yo veo es que todo gira alrededor de la toma del poder, entonces después vamos por las gobernaciones (…) Pienso que el referendo es constitucional, está dentro de la ley, pero se va a dar en el marco que lo permita la misma ley. Tienen que recoger las firmas, pero ya sabes que hubo de todo, ya Jorge Rodríguez lo presentó: muertos firmando, forjamiento de firmas, gente que no lo hizo y se la llevaron como hubiera hecho (…) Si ellos cumplen con los pasos que da la ley habrá referendo cuando lo establezca el propio árbitro, pero no es que referendo ya y sino reviento y quemo todo hay que respetar al árbitro y la ley, ya sabemos qué es lo que quieren, lo único que quieren es el poder, pero existen lapsos constitucionales, ahorita lo que correspondía era una elección de gobernadores, deberíamos estar todos es preparando la elección de gobernadores, ellos distrajeron la cosa y cuando les dio la gana dijeron que lo que querían es el referendo, después referendo y gobernadores, lo que tienen es una gran confusión porque no tienen unidad de criterio, no debaten las cosas y lo único que quieren es poder.
— Hablando de las regionales, ¿usted aspirará a reelección?
— Eso lo va a determinar el partido, la gente y finalmente los votantes, si voy a continuar o no, yo me siento con fuerzas, tengo planes y proyectos por desarrollar, avancé en algunos, en otros necesito todavía tiempo, pero eso lo define mi partido, es una decisión que se va a tomar consensuada, pero la última palabra la tendrán los zulianos: haré lo que la gente diga.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com